Abstract:
INTRODUCCIÓN.
El hecho de que en México la educación primaria sea gratuita y obligatoria ha creado un grave problema con la demanda de inscripción en las escuelas del nivel medio básico.
La creciente demanda que existe para ingresar en el ciclo secundario ha hecho urgente la necesidad de hacer una selección de la población demandante, ya que, en determinadas
escuelas, las solicitudes de inscripción casi triplican el número de vacantes, lo que hace necesario acomodar a los aspirantes rechazados en otras escuelas cuyo cupo efectivo
lo permita por la escasa demanda de inscripción que tienen.
Antes de 1972, las autoridades escolares, se vieron obligadas a utilizar varios recursos (promedio calif. 6° primario, pruebas de rendimiento, pruebas de inteligencia, etc.) para seleccionar a los aspirantes y tratar de resolver este problema que se acentúa con el paso de los años.
La aplicación de estos recursos presentó una serie de deficiencias e inconvenientes. Las pruebas de conocimientos eran de bala calidad técnica y su contenido podía ser conocido
antes del examen. Con respecto a la utilización de la edad como único medio de selección de aspirantes se encontró que no es una variable suficientemente válida.
En lo referente a los promedios de calificaciones de sexto grado de primaria, no pueden utilizarse como único elemento de juicio para evaluar el rendimiento escolar de los alumnos y para proceder a Una selección justa de los aspirantes a ingresar en el primer año de secundaria, ya que se ha observado entre los profesores de primaria una heterogeneidad de criterios para estimar el rendimiento escolar o sea, que iguales calificaciones puedan tener diferentes significados según el criterio de los profesores.
La primera vez que se aplicó en México un instrumento de medición fue en 1925, cuando empezaron a funcionar las escuelas secundarias federales del país. En esa ocasión el
objetivo primordial fue averiguar los conocimientos básicos adquiridos por los alumnos del nivel primario para que sirvieran de norma al profesor del ciclo secundario en su tarea
educativa.
A partir de 1972, para poder realizar una selección de aspirantes, debido a la gran demanda de inscripción, se hizo necesario contar con un instrumento más objetivo que sirviera para evaluar la aptitud numérica y verbal de los aspirantes y que, tomando en cuenta las calificaciones obtenidas en el ciclo primario, permitiera admitir una parte de
la demanda y redistribuir o rechazar el resto. Es decir, una prueba que permitiese discriminar o diferenciar las habilidades de los aspirantes, en los aspectos numérico y verbal.
Para resolver el problema, se nombró una comisión que fijó como objetivo general:
Establecer un sistema de selección de aspirantes que tomara en cuenta el promedio de calificaciones obtenidas en el sexto grado de primaria, los resultados de un examen de
habilidad numérica y verbal, y la edad de los aspirantes.
Y como objetivos específicos:
Analizar las técnicas utilizadas en los años anteriores ya mencionados para la selección de alumnos, con el propósito de establecer su baja calidad como instrumento de se
lección; formular un procedimiento para transformar las calificaciones absolutas, en calificaciones relativas, otorgadas por los profesores de enseñanza primaria; estudiar las condiciones para la utilización de sistemas electrónicos en el proceso de ubicación de los alumnos en las escuelas del ciclo básico de educación media; establecer los elementos de que debe constar la prueba de selección.
El instrumento elaborado por la comisión mencionada, recibió el nombre de prueba AG 72/73 (aptitud general 72/73), test de papel y lápiz que constó de 50 reactivos de los cuales 30 integraron la parte verbal y 20 la parte numérica.
La prueba se elaboró considerando, en primer lugar, que la capacidad mental no es algo que puede medirse directamente, o que puede describirse como se hace con un objeto material y que su presencia puede advertirse a través de la conducta manifiesta del aspirante. Para ello es necesario presentarle al aspirante un estímulo ante el cual reaccione.
Este estímulo lo representó, en este caso, la prueba AG, con respecto a los aspectos numérico y verbal. La prueba AG, además de dar ciertos indicadores relacionados
con los aspectos numérico y verbal, podría servir como un punto de partida para estudios subsecuentes relacionados con el rendimiento escolar dentro del sistema educativo y
para dar pautas para mejorar las estrategias didácticas.
Además, al aplicar la prueba AG debidamente controlada, en una población aproximada de 115,000 aspirantes, se trató de obtener, una base de referencia para determinar si se estaban cumpliendo los objetivos perseguidos por el Estado en materia de Educación Primaria.
En México, desde 1958, prevalece gran inquietud en los centros educativos superiores por tener un instrumento de evaluación, apropiado para utilizarlo en las respectivas poblaciones. Se han realizado numerosos estudios basados en pruebas de inteligencia y de rendimiento, en cambio son pocos los estudios realizados para pruebas de aptitud general en educación media básica; de allí la necesidad de realizar investigaciones de este tipo. RR