Abstract:
La contaminación de cultivos por microorganismos oportunistas es un problema serio para las entidades que se dedican al estudio de enfermedades parasitarias, en donde parte de la investigación consta del cultivo del microorganismo en laboratorio y algunas veces en el campo.
El conocimiento sobre el uso de agentes antimicrobiales y sus dosis en el cultivo de Leishmania in vitro es escaso.
La penicilina, antibiótico de conocimiento universal, se utiliza frecuentemente solo o en combinación con otros agentes, tales como gentamicina o estreptomicina. Los antimicóticos son menos conocidos y por lo tanto su uso no es tan frecuente.
Se utilizaron cultivos de dos subespecies de Leishmania braziliensis para la evaluación de los antibióticos penicilina, gentamicina, estreptomicina y amikacina y el antimicótico 5-fluorocitosina en concentraciones de 0, 50, 100 y 200 ug/ml. El medio utilizado fue Evans, combinado con sangre, como la fase sólida y Schneider, combinado con suero fetal de ternero, como sobrenadante o fase liquida. Se hicieron tres experimentos por separado: con L. braziliensis ssp. (subespecie no determinada) proveniente de lesión humana, con L. braziliensis braziliensis proveniente de lesión humana y con L. braziliensis braziliensis proveniente de lesión de hamster. En los tres experimentos se evaluaron los 5 agentes en sus 4 concentraciones.
Se hicieron conteos diarios de la población (promastigotes viables por mililitro de medio) tomando como criterio de viabilidad la presencia de movimiento flagelar en los parásitos. Se trazaron curvas de crecimiento con medidas de tendencia central.
Hubo diferencia significativa en el crecimiento de la subespecie no determinada respecto de la L. b. braziliensis, sin tomar en cuenta el tipo de agente o la concentración a la cual se encontraba. Según los aspectos evaluados, L. braziliensis braziliensis creció mejor que L. braziliensis ssp. Por otro lado, no hubo diferencia significativa entre agentes o entre concentraciones. Aparentemente, ningún agente inhibió el crecimiento del parásito a las concentraciones probadas.
En general, se recomienda utilizar cualquiera de los antibióticos en combinación con el antimicótico para reducir el riesgo de contaminación de bacterias y hongos. La concentración puede quedar a criterio del investigador. RR