Abstract:
INTRODUCCIÓN. En el presente ensayo tengo, como objetivo fundamental,
plantear el análisis de la relación alumno-docente, dentro
del aula, en lo que se refiere -básicamente- a los aspectos
que de una u otra forma contribuyen a crear un clima de indisciplina
o de disciplina en la misma, según mi experiencia.
La palabra "indisciplina" la empleo para designar el tipo
de comportamiento que desintegra al grupo de estudiantes y
que bloquea el proceso de enseñanza-aprendizaje. No me refiero
al tipo de conducta creativa y ágil que enriquece tal
proceso.
Para lograr tal objetivo, utilizo un marco referencial de
Análisis Transaccional, el cual hago explícito en el Capítulo
III de este trabajo, luego de haber realizado una breve exposición
de las características principales de la etapa adolescente,
en el Capítulo II. En el Capítulo IV propongo una metodología
para mejorar tales relaciones, docente-alumno, en
forma tal, que se logre una mejor disciplina y un mayor aprendizaje.
Asimismo, ilustro esto a través de la presentación de
un caso concreto.
Las conclusiones y recomendaciones ocupan -antes de la bibliografía-
los dos últimos capítulos del ensayo. La elaboración de este trabajo obedece a la firma convicción que en lo personal
aliento, acerca de que se ha dado relativa poca importancia
al aspecto afectivo interaccional de la relación maestro-alumno,
mientras que parece haberse puesto una gran cantidad
de energía y tiempo en el análisis de las metodologías de trabajo
docente y en los aspectos referentes a la elaboración de
los planes de estudio. La desproporción existente entre los
dos aspectos anteriores, ocasiona el peligro de caer -como de
hecho sucede muchas veces- en estructuras vacías en las que
abundan las normas rígidas y la burocracia escolar, así como
los rituales pedagógicos, y en las que falta lo que -a mi juicio-
debiera ser la principal preocupación de aquellos que de
algún modo estamos involucrados en el proceso enseñanza-aprendizaje,
esto es: la conciencia de que es imprescindible crear
e implementar las condiciones que hagan del aula y especialmente
de la relación alumno-maestro, una interacción dinámica.
Esta interacción debiera estar fundamentada, no en prejuicios
o en la ignorancia de las propias capacidades y limitaciones,
sino más bien en el auto-conocimiento de ellas (auto-diagnóstico)
y en el conocimiento de la otra persona (el alumno) en
cuanto a las posibles respuestas que él de dentro de sus propias
y particulares características de personalidad. Por supuesto,
la plena implementación de una escuela basada en la
concepción que he indicado anteriormente, requiere que cada
maestro sea -en cierta forma- un experto conocedor de las
ciencias de la conducta, y ciertamente esto es imposible (o por lo menos muy difícil) dentro de nuestro marco contextual
de realidad. Por otra parte, quizás no sea indispensable.
No obstante, pienso -según mi experiencia como maestro y
asesor- que sí es posible desarrollar una metodología tendiente
a incrementar la conciencia del docente acerca de sus
capacidades y limitaciones y que al mismo tiempo aumente el
conocimiento que él tiene sobre las posibles reacciones de sus alumnos. Es precisamente acerca de esta posibilidad de
la que trato en este ensayo.
De allí que quizás sea útil aclarar en este punto que con
este trabajo no pretendo dar respuesta al problema de relación
alumno-docente en su total dimensión. Más bien propongo una
dinámica de cambio basada en un marco referencial de tipo psicológico
(Análisis Transaccional), la cual ha demostrado -en
la práctica- ser susceptible de ser utilizada en establecimientos
mixtos de enseñanza primaria y enseñanza media, cuya población
sea predominantemente de clase media y media alta. Además,
tal como lo recalco más adelante, tal dinámica ha de ser
dirigida por un profesional responsable y con experiencia en el
manejo del "Análisis Transaccional", y que además posea una
formación de tipo docente.
Dado que los instrumentos psicológicos que utilizo (y que
describo con cierto detalle en el Capitulo III), son de tipo
general y aplicables a cualquier persona, la metodología que propongo es susceptible de ser ensayada -a nivel experimental- en
instituciones educativas distintas a las del tipo descrito.
Sin embargo, pienso que esta posibilidad debería ser estudiada
con detenimiento y responsabilidad, antes de intentar tal adaptación.