Determinación del estado nutricional de niños de 24-30 meses que recibieron lactancia materna prolongada por más de dos años.

Abstract

La lactancia materna satisface idealmente las necesidades de los infantes en el periodo comprendido entre los 4-6 meses, a partir de entonces esta puede o no prolongarse exclusivamente dependiendo de como crece y se desarrolla el niño. Particularmente en Guatemala los periodos de amamantamiento se ven muchas veces prolongados por 24 mese o más alterando el desarrollo y crecimiento normal de los niños. En el presente estudio se recolectaron datos antropométricos de peso y longitud, así como aspectos socioeconómicos y recordatorio del consumo alimentario de 24 horas de 100 niños entre 24-30 meses de las área urbana y rural del departamento de Sacatepéquez y que asistirían a un programa de ayuda alimentaria en un hospital de la ciudad de Antigua Guatemala, en dicho departamento. El propósito era evaluar el estado nutricional de los niños que hubieran tenido lactancia materna prolongada por 24 o más meses (por medio de adecuaciones antropométricas del Peso/Talla. Talla/Edad y Peso/Edad, desviaciones estándar y canales de crecimiento percentilar) , y determinar que factores benefician o no el patrón de lactancia prolongada. La población estudiada estuvo comprendida por niños indígenas y/o niños de escasos recursos, la mayoría de los cuales residían en área urbanas y en gran número, carecían de servicios básicos del hogar, principalmente drenajes. Los niños de mayor edad presentaron mejor estado nutricional sobre los más pequeños y en general la dieta de la población presenta déficit en el consumo de calorías, teniendo un consumo adecuado de proteínas. Los niños de mayor edad presentaron mejor estado nutricional sobre los más pequeños y en general la dieta de la población presenta déficit en el consumo de calorías, teniendo un consumo adecuado de proteínas. Los niños fueron ablactados a los 4 meses o antes presentaron el mejor estado nutricional, así como aquellos que recibieron lactancia materna por seis meses o menos (posiblemente asociado a un estado nutricional deficiente de las madres). Los alimentos más comunes en la ablactación fueron, los cereales y las verduras. La mayoría de los niños que no prolongaron su patrón de lactancia materna fueron destetados entre los 10-12 meses, siendo la causa principal, la presencia de un nuevo embarazo. Los resultados revelaron que la población estudiada estaba nutricionalmente bien al momento de la evaluación (adecuación Peso/Talla, normal), pero presentaba sigos de desnutrición crónica (adecuaciones Peso/Edad y Talla/Edad bajo lo normal), así también, que el sexo femenino presentaba un mejor estado nutricional que el masculino. Hubo un mayor porcentaje de niños con lactancia materna que crecían abajo del cincuenta percentil de las tres adecuaciones evaluadas comparadas con los niños que no habían prolongado la lactancia, aunque era mayor el porcentaje de niños que no habían prolongado la lactancia materna que presentaban desnutrición aguda o crónica al momento de la evaluación.