Influencia del coeficiente emocional e intelectual en el desempeño laboral de un equipo de ventas de una empresa de electrodomésticos.

Abstract

El mundo laboral está cambiando y ya no se puede hablar de desarrollarse en una única profesión o de permanecer en el mismo puesto, hoy en día se habla de aportar un valor extra a la empresa e ir creciendo paralelamente y esto ya no se consigue sólo con un coeficiente intelectual superior, sino que también se necesitan desarrollar el coeficiente emocional que nos brinda habilidades como percibir, juzgar, expresar y modificar las emociones propias así como comprender las de los demás. El objetivo de esta investigación fue determinar si el coeficiente emocional está más relacionado que el coeficiente intelectual, con el desempeño laboral esperado dentro una empresa de ventas de electrodomésticos dirigida al sector popular, en la ciudad de Guatemala. La muestra estuvo conformada por 70 vendedores de la ciudad capital, de ambos géneros (un 14% conformado por mujeres y un 86% conformado por hombres), quienes oscilaban entre los 18 a 35 años de edad. Como instrumentos de evaluación se utilizó la prueba WPT (Wonderlic Personnel Test) para medir el coeficiente intelectual; el TMMS (Train Meta Mood Scale) para obtener el coeficiente emocional y por último se aplicó un modelo de evaluación del desempeño desarrollo especialmente para esta investigación. Por medio del análisis de la correlación realizada entre las variables se encontró que existe una correlación positiva moderada, estadísticamente significativa a nivel de 0.05 entre la subescala de claridad y el desempeño laboral de un equipo de vendedores. Así mismo, se determinó que tanto la subescala de claridad como la subescala de atención están correlacionadas positivamente, a un nivel de 0.05 con la escala total del TMMS (Traint Meta Mood Scale). Se puede concluir que no existe una correlación estadísticamente significativa a nivel de 0.05 entre ninguna de las escalas totales de las herramientas utilizadas por lo que se procedió a rechazar las Hipótesis H1.1, H1.2 y H1.3. Se recomendó a las gerencias dar más apoyo al departamento de capacitación en el desarrollo y aplicación de talleres vivenciales que estimulen el coeficiente emocional, crear programas de seguimiento de los conocimientos técnicos aprendidos, monitorear y evaluar constantemente el desempeño laboral de los vendedores.