Abstract:
A lo largo de la historia evolutiva, el humano ha atravesado procesos que lo involucran con otros seres vivos. Estas relaciones que enlazan al hombre con otros grupos de organismos han sido estudiadas desde hace tiempo y a dicha relación se le conoce como Etnobiología (Posey, 1987). El enfoque de esta ciencia se encuentra en la asociación de los conocimientos naturales y sociales, lo que permite captar ampliamente los conocimientos para la clasificación y uso de recursos naturales por las sociedades. Derivada de la Etnobiología, se encuentra la Etnobotánica. Esta última se ha definido como una ciencia interdisciplinaria que toma y analiza conocimientos, costumbres, rituales y creencias que se originan de las interacciones hombre plantas. Dicho término fue utilizado por primera vez por Harshberger (1986). Por tener una naturaleza interdisciplinaria, la Etnobotánica, abarca diversas áreas: Botánica, Medicina, Farmacología, Toxicología, Química, Nutrición, Historia, Lingüística y Arqueología, entre otras (Martín, 2001). A pesar de esto, históricamente, la Etnobotánica se ha enfocado en aplicaciones puramente medicinales y alimentarias, con frecuencias del 54 y 46% respectivamente (da Silva et al. 2014). Con el tiempo, estas investigaciones han adquirido relevancia debido a la creciente pérdida del conocimiento tradicional y la degradación de los ecosistemas. Por lo tanto, poseen un valor importante en la conservación de la diversidad biológica y en el desarrollo de las comunidades locales (Bermúdez et al. 2005).
Description:
Revista de la Universidad del Valle de Guatemala. Artículo de Investigación. Departamento de Biología, Facultad de Ciencias y Humanidades. Departamento de Antropología, Facultad de Ciencias Sociales. Facultad de Ingeniería. Departamento de Arqueología, Centro de Investigaciones Arqueológicas y Antropológicas, Universidad del Valle. Campus Central y Altiplano. (61-76 p.)