Abstract:
El grupo de científicos que estudiaron los coronavirus detectados
en el 2003 (SARS-CoV-1) y en el 2012 (MERS) se pusieron en
alerta cuando fueron informados que se había colocado en
línea el genoma completo de un virus nuevo detectado en
Wuhan, el cual causaba el contagio entre humanos en forma
acelerada . Inmediatamente dicha red global de biólogos
estructurales cambió el trabajo científico en marcha en sus
laboratorios hacia una meta común: encontrar las estructuras
proteicas del virus. Para lograrlo, necesitaban escudriñar las
29,811 bases de ácido ribonucleico (ARN) del genoma, buscando
las instrucciones de las 25-29 proteínas posibles.
Description:
Revista de la Universidad del Valle de Guatemala. Perspectiva. Centro de Ingeniería Bioquímica, Instituto de Investigaciones, Universidad del Valle de Guatemala. (9-12 p.)