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El objetivo principal de la presente tesis fue identificar las estrategias que utilizan los/as vendedores/as de comida de ferias religiosas del Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala para afrontar situaciones imprevistas que pueden causar inestabilidad laboral, como ha sido el impacto de la pandemia del COVID-19. Con la información recolectada se creó un perfil del/a vendedor/a de comida de las ferias y se analizó cómo los recursos a su alcance, sean estos personales, familiares o colectivos, les han ayudado a afrontar la inestabilidad laboral. También se analizó el papel de la Asociación de Comerciantes de Ferias (ACOFEGUA) y de la Dirección de Comercio Popular de la Municipalidad de Guatemala para conocer el apoyo brindado a los/as vendedores/as para afrontar el impacto del COVID-19. Para el análisis en esta investigación se utilizó un paradigma interpretativo con enfoque cualitativo. La recolección de datos se realizó con 12 entrevistas telefónicas semi estructuradas a vendedores/as de comida de las ferias de Jocotenango y de la Virgen del Rosario. Los/as vendedores/as fueron seleccionados/as al azar de la lista virtual de contactos de vendedores/as de comida de las ferias de Jocotenango y la Virgen del Rosario, publicadas por la Municipalidad de Guatemala en redes sociales y medios de comunicación. También se llevaron a cabo dos entrevistas semi estructuradas con representantes de ACOFEGUA y de la Dirección de Comercio Popular de la Municipalidad de Guatemala para conocer su rol con los/as vendedores/as de ferias ante el impacto causado por el COVID-19. Uno de los principales resultados fue que a pesar de las acciones tomadas por ACOFEGUA y la Dirección de Comercio Popular de la Municipalidad de Guatemala para mejorar las condiciones laborales de los/as vendedores/as de comida, dichas acciones no han sido suficientes para solventar las necesidades de los/as vendedores/as durante la pandemia del COVID-19. Las acciones de la Dirección de Comercio Popular de la Municipalidad de Guatemala y asociaciones de vendedores/as de ferias, como ACOFEGUA y otras, se han enfocado principalmente en mejorar el ámbito de las ferias para que haya más visitantes y por lo tanto más personas consumiendo los productos ofrecidos. Sin embargo, dichas acciones no han logrado reactivar las actividades de las ferias de manera que los/as vendedores/as logren cubrir sus necesidades básicas a nivel personal y familiar. Debido a la naturaleza de las ventas de comida en las ferias, las situaciones inesperadas, como robos, extorsiones, enfermedades y otras, provocan inestabilidad laboral entre los/as vendedores/as ya que deben dejar o cerrar sus puestos por algunas horas o incluso días para poder solucionar sus situaciones. El cierre de sus puestos por un tiempo determinado implica, además de pérdidas económicas y de clientela, sanciones tanto de la asociación correspondiente como de la Dirección de Comercio Popular de la Municipalidad de Guatemala, en el caso de la Ciudad de Guatemala. La pandemia del COVID-19 planteó nuevos retos a los/as vendedores/as de comida de las ferias tanto por la duración de la pandemia como por las restricciones impuestas por las autoridades municipales y el gobierno central, así como por las medidas de prevención adoptadas por la población.
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